miércoles, 16 de junio de 2010

El revolucionario arte de la noesiterapia, curación por el pensamiento

Si se enseña a usar positivamente el pensamiento, se mejoran los resultados obtenidos en el tratamiento de todas las enfermedades y se facilita la recuperación de la armonía perdida.
No son palabras mías, sino del eminente médico y cirujano vascular Dr. Ángel Escudero Juan, quien desde hace más de 30 años realiza sus intervenciones quirúrgicas sin anestesia química y con sus pacientes totalmente despiertos y conscientes de su propia cirugía.
El Dr. Escudero es español y ha desarrollado la mayor parte de su actividad profesional en Valencia. Es creador de una escuela humanística dentro de la medicina que llamó Noesiterapia o curación por el pensamiento. Desde el año 1972 realiza su trabajo quirúrgico con analgesia psicológica, difundiendo su experiencia entre miles de profesionales de la medicina de todo el mundo.
Es tal el impacto creado por su descubrimiento que en el año 2004 la Real Academia de la Historia le solicitó su biografía para ser incluida en el Diccionario Biográfico de la Historia de España.
¿Qué es la Noesiterapia?
Su nombre procede del griego, noesis (acción de pensar) y terapia (curación). Noesiterapia es el uso de las capacidades del pensamiento para programar la computadora biológica del cerebro como terapia. Pero no sólo tiene aplicación, como veíamos antes, en el mundo de la cirugía. Para Escudero, la noesiterapia puede aplicarse en todas las especialidades médicas y en cualquier situación de la vida.
"La noesiterapia ha devuelto a los pacientes el protagonismo en el proceso de la curación. Nosotros les enseñamos como funciona el cerebro y la trascendencia que el pensamiento tiene en la vida del ser humano. Damos autonomía a los pacientes; ellos deben ser sus propios médicos. Les enseñamos, les aconsejamos, les ayudamos, y son ellos los que ponen en marcha los mecanismos de la curación y cambian el rumbo de sus vidas".
¿Cómo funciona?
Cada pensamiento produce en el organismo una respuesta biológica. De hecho, no existe un solo mecanismo biológico que escape a la influencia del pensamiento. Dicho de otra manera, cada pensamiento influye en el encauzamiento y utilización de las energías globales del hombre, y según su contenido se va a producir un efecto útil beneficioso, o negativo y perjudicial.
El Dr. Escudero compara al cerebro con el volante de un coche: "Si en un tramo recto de carretera el conductor da un giro brusco al volante, a derecha o izquierda, el coche obedece porque funciona bien, incluso saliendo de la carretera y sufriendo un accidente. El cerebro equivale al volante de la vida humana; su dueño lo programa, lo dirige con cada uno de sus pensamientos, que él se encarga de cumplir, aunque sean inadecuados, aunque sean incorrectos, negativos, aunque de ellos se derive algún mal para su dueño… y es que el cerebro se limita a cumplir el programa. Cada pensamiento es una semilla de bien o de mal en la propia vida, con proyección a nuestro entorno".
Efectos de los pensamientos positivos y negativos
Cuando los pensamientos son positivos se produce en nuestro organismo una respuesta biológica global también positiva, observándose los siguientes signos:
Boca húmeda con saliva fluida, pupila contraída o con tamaño adecuado a la luz ambiente, piel sonrosada y seca, ritmo cardiaco normal, tensión arterial normal, relajación muscular, tranquilidad y control, mejor coagulación, mejor cicatrización de las heridas y mejor estado inmunológico. De todos estos signos es la boca húmeda el más importante y luego veremos por qué.
Por el contrario, ante pensamientos negativos encontramos: boca seca o saliva espesa y blanca, pupila dilatada, taquicardia, vasoconstricción, hipertensión, palidez y sudor frío, tensión muscular, nerviosismo, y disminución del estado inmunológico.
La noesiterapia, de forma fácil y con un sencillo entrenamiento, se encarga de dar un giro de 360º a esta situación, es decir, hay que cambiar la respuesta biológica negativa y transformarla en positiva. Para este cometido se puede actuar desde dos frentes, como profilaxis o prevención, que requiere un proceso educativo desde el comienzo de la vida, y como terapia con la utilización del pensamiento como curación.
¿Cómo dar órdenes al cerebro?
Según Escudero, ante una situación de dolor o enfermedad basta una simple orden al cerebro de qué zona del cuerpo deseamos anestesiar para eliminar un dolor, o pensar que beneficio deseamos obtener para que un órgano pueda mejorar o recuperar su anterior función de salud.
Antes de ejecutar una orden determinada, es fundamental estar ante una respuesta biológica positiva, y para saber si lo estamos hay un indicador que nos lo muestra: la lengua. Ésta debe estar húmeda y la saliva debe ser fluida (es un indicador imprescindible). Si no es así, bastará sólo con pensar que nuestra boca se llena de saliva y debe ser suficiente, o bien realizar un par de inspiraciones, inhalando y exhalando aire por la nariz para conseguir el efecto deseado.
Ahora nuestra boca está hidratada y el cerebro listo para ejecutar la orden que deseemos y siempre positiva para nuestra salud. Pueden intentarlo ustedes mismos… seguro que se sorprenden.
Mi experiencia personal
El pasado 17 de diciembre tuve el privilegio de asistir a un curso de noesiterapia impartido por el Dr. Escudero y pude comprobar por mí mismo y gracias a su supervisión, cómo tras ordenar a mi cerebro que mi brazo derecho se anestesiara, fuera atravesado de lado a lado de mi antebrazo por una aguja sin sentir el más mínimo dolor y la ausencia de sangre al retirar la aguja.
Curiosamente, el viernes 23 de diciembre, en el programa Diario de la Noche de Telemadrid, y que con gran brillantez dirige y presenta Germán Yanque, entrevistó al conocido escritor Fernando Sánchez Dragó con motivo de la publicación de su último libro Kokoro (corazón en japonés). Sánchez Dragó ha sido sometido recientemente a una intervención quirúrgica de corazón.
Relataba que al despertarse de su anestesia en la UVI observaba el monitor al que estaba conectado donde se apreciaban sus constantes vitales, y comentaba que tan sólo con su pensamiento era capaz de modificar las gráficas que aparecían. De hecho había solicitado a Estados Unidos un aparato igual para realizar un estudio sobre su vivencia.
Para profundizar más sobre el tema y en las fechas en que nos encontramos sería una buena idea que les pidieran a los Reyes Magos el libro del Dr. Escudero Curación por el Pensamiento, y los 2 CD Aprende a relajarte. Conoce el poder creador de tu pensamiento y Curación por el Pensamiento. Estoy seguro de que les apasionará.
"Los hombres deberían saber que del cerebro y nada más que del cerebro vienen las alegrías, el placer, la risa, el ocio, las penas, el dolor, el abatimiento y las lamentaciones". Hipócrates

Nota: Concentrarse en la salivacion de la Boca para disminuir el dolor 

! Los humanos somos seres rítmicos !

¿Cuál es la función de las ondas cerebrales diferentes?



Ned Herrmann es un educador que ha desarrollado modelos de actividad cerebral y los ha integrado en la enseñanza y la formación en gestión. Antes de fundar el Grupo de Ned Herrmann, en 1980, se dirigió hacia la educación de gestión en General Electric, donde desarrolló muchas de sus ideas. He aquí su explicación.





Es bien sabido que el cerebro es un órgano electroquímico, los investigadores han especulado que un cerebro en pleno funcionamiento puede generar hasta 10 vatios de energía eléctrica. Otros investigadores más conservadoras calculan que si los 10 millones de células nerviosas interconectadas de alta en un tiempo que un solo electrodo colocado en el cuero cabelludo podría grabar algo como cinco millionths a 50 millonésimas de voltio. Si había suficiente cabelleras conectado usted podría ser capaz de encender la bombilla de una linterna.



A pesar de que esta energía eléctrica es muy limitado, que se presenta en formas muy específicas que son características del cerebro humano. La actividad eléctrica que emana del cerebro se muestra en forma de ondas cerebrales. Hay cuatro categorías de estas ondas cerebrales, que van desde las de más actividad a la menor actividad:



Ondas Beta



Cuando el cerebro se despierta y participan activamente en las actividades mentales, que genera ondas beta. Estas ondas beta son de amplitud relativamente bajos, y son las más rápidas de las cuatro ondas cerebrales diferentes. La frecuencia de las ondas beta rangos 15 a 40 ciclos por segundo. Las ondas beta son las características de una mente muy comprometida. Son las más rápidas y dan testimonio de nuestra actividad mental. Cuando estamos agitados por pensamientos compulsivos se dice que estamos en estado de “hiperactividad”, éste estado corresponde a las “ondas Beta malas”. Por el contrario cuando nuestro cerebro opera a gran velocidad pero con lucidez, estaremos en presencia de “ondas Beta buenas” las que testimonian una licidez mental extrema, estados de intuición pura…Una persona en la conversación activa sería en versión beta. Un polemista estaría en beta alta. Una persona que hace un discurso, o un maestro, o un talk show todo sería en beta cuando están ocupados en su trabajo.



Ondas Alpha



La categoría de las ondas cerebrales siguiente en orden de frecuencia es el alfa. Cuando beta representada despertar, alfa representa no excitación. Alpha ondas cerebrales son más lentas, y más en amplitud. Sus rangos de frecuencia de 9 a 14 ciclos por segundo. Las producimos cuando cerramos los ojos y relajamos nuestra actividad mental. Son ondas más lentas que testimonian un estado de calma, de paz interior. Nuestra imaginación puede ejercitarse favorablemente cuando entramos en estado Alpha y podemos visualizar escenas en la pantalla de nuestra psiquis, entamos en una especie de terrreno movedizo, que nos pone en contacto con zonas de nuestro ser de las que no teniamos verdadera conciencia y con informaciones en estado latente.Una persona que ha terminado una tarea y se sienta a descansar a menudo en un estado alfa. Una persona que toma tiempo para reflexionar o meditar es por lo general en un estado alfa. Una persona que toma un descanso de una conferencia y paseos en el jardín es a menudo en un estado alfa.



Ondas Theta



El siguiente estado, las ondas cerebrales theta, son típicamente de amplitud aún mayor y menor frecuencia. Este rango de frecuencias es normalmente entre 5 y 8 ciclos por segundo. Una persona que ha tomado tiempo libre de una tarea y empieza a soñar despierto es a menudo en un estado de ondas cerebrales theta. Una persona que está manejando en una autopista, y descubre que no puede recordar los últimos cinco kilómetros, a menudo en un estado theta - inducida por el proceso de conducción de la autopista. La naturaleza repetitiva de esa forma de conducción en comparación con un camino rural que diferenciar un estado theta y un estado de beta a fin de realizar la tarea de conducir de forma segura.



Las personas que hacen mucho de la autopista de conducción consiguen a menudo las buenas ideas durante los períodos en los que están en theta. Las personas que corren al exterior a menudo se encuentran en el estado de relajación mental que es más lento que el alfa y theta en cuando, son propensos a un flujo de ideas. Esto también puede ocurrir en la ducha o la bañera o incluso mientras se afeita o se cepilla el pelo. Es un estado donde las tareas se vuelven tan automáticas que mentalmente puede desembarazarse de ellos. El flujo de ideas que pueden tener lugar durante el estado theta suele ser libre y se produce sin censura o la culpa. Es típicamente un estado mental muy positivo.



Ondas Delta



El estado final es de ondas cerebrales delta. Aquí las ondas cerebrales son de la mayor amplitud y más lento de la frecuencia. Por lo general se centran en un rango de 1,5 a 4 ciclos por segundo. Nunca bajar a cero, porque eso significaría que se haya muerte cerebral. Pero, en el fondo sin sueños dormir se llevará hasta el más bajo de frecuencia. Por lo general, 2 a 3 ciclos por segundo.Cuando vamos a la cama a leer durante unos minutos antes de intentar dormir, es probable que la versión beta de baja. Cuando ponemos el libro, apagar las luces y cerrar nuestros ojos, nuestras ondas cerebrales, descenderá del beta a alfa, theta y que, finalmente, cuando nos dormimos, a Delta.



Con infinito abrazo,



carlosesteban

lunes, 14 de junio de 2010

El dinero es un estado mental

El dinero es un estado mental






Podemos ir detrás de él como si fuera algo real y tangible, pero es fantasía, un sueño. Cuando lo conseguimos, nos damos cuenta (o deberíamos darnos cuenta) de que hemos cambiado significativamente en el proceso de obtenerlo. Nos volvemos parte de ese objetivo, o mejor dicho, objeto dado que el objeto en cuestión es un espejismo, terminamos viéndonos muy diferentes a aquello que deseábamos ser.



La respuesta correcta



De las cinco figuras que aparecen abajo, seleccione aquella que sea realmente distinta a todas las demás:









A B C D E





¿Cuál de estas cinco figuras es realmente distinta de todas las demás?.



Si usted eligió la figura B, felicitaciones: su elección es la correcta. La figura B es la única que tiene sólo líneas rectas. Puede darse unas buenas palmadas en la espalda. Ahora bien: si usted eligió la figura C, pensando en que es la única que es asimétrica, también tiene razón. C es la respuesta correcta. Lo mismo puede decirse de la figura A. Es la única que carece de discontinuidad. Por lo tanto, a es la respuesta correcta. ¿Y qué ocurre con D?. Es la única que tiene tanto una línea recta como una línea curva. De modo que D es la respuesta correcta... al igual que las anteriores. Respecto de E, es la única que es la proyección de un triángulo no euclidiano en un espacio euclidiano. Por lo tanto, también es la respuesta correcta. En otras palabras, todas son correctas según distintos puntos de vista.



No obstante, la mayor parte de nuestro sistema educacional está orientado a enseñarnos que hay una sola respuesta correcta.



Para la época en que una persona termina la Universidad, habrá pasado por miles de tests y exámenes, muchos de ellos similares al que hemos presentado aquí. El clisé "respuesta correcta" ha echado firmes raíces en nuestro pensamiento. Ello puede ser muy útil para algunos problemas matemáticos en los que de hecho sólo hay una respuesta.



Lo problemático es que la mayor parte de la vida no se presenta de ese modo. La vida es ambigua; y tiene muchas respuestas correctas, todas ellas dependientes de lo que estamos buscando responder. Pero cuando pensamos que hay una sola respuesta entonces dejamos de buscar apenas encontramos una (la primera de las respuestas).



En el período de diez años que abarca la enseñanza elemental, no sólo aprendemos a encontrar la respuesta correcta sino que también perdemos la capacidad de buscar más de una respuesta. Aprendemos cómo ser específicos, pero perdemos la mayoría de nuestro poder de imaginación. Lo cual me recuerda una historia sufí:



Dos hombres tuvieron una discusión. Para llegar a un acuerdo, acudieron a un juez sufí para que sea su árbitro. El demandante presentó su punto de vista en forma elocuente y persuasiva. El juez asintió aprobatoriamente y dijo: "Le doy toda la razón". Al escuchar esto, el otro exclamó: "Espere un segundo, señor Juez, pues usted no ha escuchado aún mi opinión". Y se dedicó a exponerle con mucho cuidado y una profunda convicción. Al terminar, el juez dijo: "Le doy toda la razón".

La práctica de buscar la única respuesta correcta puede tener serias consecuencias sobre el modo en que pensemos y enfrentamos a los problemas, y cuando nos topamos con ellos generalmente reaccionamos tomando la primera, lo cual nos inhibe de ver las opciones alternativas que podrían presentarse.



Por eso, ante la segunda respuesta del juez, su secretario se acercó y le dijo: "Disculpe, Su Señoría, pero no es posible que ambos hombres tengan la razón". A lo que el juez respondió: "Le doy toda la razón".



Es entonces una regla fundamental no detenerse al encontrar la primera solución, pues seguramente no será la única y reducirá el campo de nuestras manifestaciones en el mundo material.

Pensamiento y entrenamiento de la voluntad (2/2)

Autor: Gustavo Fernández
Fuente: http://www.mailxmail.com/curso-dinero-control-mental-energotonia/pensamiento-entrenamiento-voluntad-2-2

Ejercicio número 1:




Técnica de Refuerzo de mirada



Estos ejercicios están pautados como elementos capaces de modificar la conducta de terceros, bajar sus defensas psicológicas, obligarles a actuar en el sentido que nosotros queramos y acatar nuestras sugestiones. En verdad, se encuentran teñidas de mecanismos hipnóticos. Pero, fundamentalmente -o a través de ello- incrementar la Voluntad.



Parten del supuesto que, por el comportamiento visual de un sujeto, no solo podemos juzgarlo con bastante acierto sino asimismo, por ejemplo mirándolo fijamente a los ojos, vencer sus mecanismos de resistencia.



Decimos de quien conversa con nosotros sin mirar nuestro rostro que se trata de una persona débil, de carácter inseguro o falso, por regla general, acordamos que quienes "miran el paisaje" mientras conversamos no expresan la realidad de sus pensamientos y sentimientos, mientras que el "observador del tercer botón" porque siempre parece estar mirando el tercer botón de nuestra camisa) es un individuo de poca firmeza mental o espiritual.



Nuestra firme mirada desconcierta y apabulla, y la confusión es el instrumento ideal para evitar que el otro organice sus defensas y contraataque. Para poder transmitir nuestras convicciones con nuestra mirada sin traicionarnos existe una pequeña trampa: mirar, no los ojos en sí de la otra persona, sino sólo uno de ellos, fijar allí nuestra vista y concentrarnos hasta distinguir nuestra imagen reflejada en la pupila del otro. Si la distancia no lo permite, visualizar ese reflejo. Esto brinda seguridad, confianza, ya que distrae a nuestro inconsciente de la opresión del "sentirse observado" hacia la sensación gratificante de reflejarse en un espejo.



El entrenamiento consiste en sentarse a unos cuarenta o cincuenta centímetros del rostro del compañero y permanecer todo el tiempo que sea necesario observándose fijamente en forma mutua (lógicamente, pudiéndose pestañear) con la vista clavada en un ojo, esforzándose por observarse a sí mismo reflejado en ese ojo, y con la mente ocupada sólo en eso.





Los mecanismos psicológicos con que fuimos educados no conciben a la mente conciente enfrascada en una tarea aparentemente tan mínima como esa. Por eso, aunque en principio creamos que se trata de un quehacer muy sencillo ("¿quién puede tener problemas en eso de mirarse a los ojos, simplemente?") nuestro inconsciente -que no va a transar a la hora de dejarse controlar por nuestro yo conciente- va a jugarnos algunas malas pasadas; trata de "llenar" ese vacío de acción sin acción y es por ello que sobrevienen deseos de mirar hacia otro lado. Los estímulos exteriores (ruido, por ejemplo) aparecen enormemente amplificados, nos atacan incontrolables deseos de reírnos, o el rostro de nuestro compañero parece transformarse, brillar o desvanecerse. Esto nos enseña cuán lejos estamos de conocer los procesos mentales y, en consecuencia, de controlarlos. Y esto nos lleva al ejercicio siguiente.



Practicando con cierta periodicidad esta técnica observaremos que nuestras determinaciones (por ejemplo, en las conversaciones con terceros, durante una venta o un examen) parecen mucho más firmes e influyentes. A ello debemos sumar el necesario mecanismo vocal (voz más bien grave dentro de nuestros propios tonos, pausada sin ser lenta, tonos claros, con repetidos "picos tonales" e irregular distribución de los tiempos de dicción) y el incremento en esa faceta, el éxito personal será sumamente significativo.



Ejercicio número 2



Enfocar la atención a mejorar la relación con los problemas cotidianos





La vida del ser humano se asemeja a una senda con pendientes y asperezas que en muchos tramos exige un esfuerzo especial para recorrerla. Para que esta senda no se transforme de difícil en intransitable, uno ha de discernir con claridad las dificultades que debe superar de los problemas que tiende a originar.



Las dificultades son propias de la vida y marcan los momentos que exigen mayor atención y esfuerzo. Nadie está libre de dificultades: todos los seres humanos tienen que luchar para subsistir, están sujetos a accidentes, a enfermedades, a catástrofes naturales o no, a las limitaciones de la sociedad, a la declinación y la muerte. Precisamente, las dificultades señalan los obstáculos que es necesario superar para continuar desenvolviéndose.



Los problemas, en cambio, son originados por uno mismo al no saber enfrentar las dificultades.



Uno puede saber fácilmente cuándo enfrentar una dificultad y cuándo un problema, observando su actitud. Cuando se confronta una dificultad se acepta ese desafío y se está pronto para responder a él. Uno comprende que lo que sufre es parte de la vida y busca en sí mismo recursos que lo ayuden a superar la dificultad. Comprende también que necesita consejo y lo busca con una actitud abierta, dispuesto a trabajar. Por el contrario, cuando uno confronta un problema busca soluciones fuera de sí mismo, culpa a otros y, sobre todo, desoye los consejos que lo estimulan a que descubra sus opciones, desarrolle su discernimiento y genere en sí mismo las fuerzas para superar la situación.



Cuando se tiene un problema se quiere dejar de sufrir. Uno desea especialmente que algo o alguien cambie para eliminar la causa de su sufrimiento. Esta actitud frecuentemente lleva a estrellarse contra la propia impotencia, ya que muy pocas veces uno puede cambiar las circunstancias o las personas imponiendo sus deseos. Como con angustia y reacción no consigue superar el problema, hace un problema mayor del conjunto de problemas que genera con su actitud.



Una causa frecuente de problemas es la actitud de pretender alcanzar objetivos sin tener que recorrer el sendero que lleva a ellos. El ser humano lo quiere todo, pero rechaza el esfuerzo necesario para realizarlo. Es fácil esforzarse mientras hay entusiasmo; pero cuando éste decae es común pensar que la vida es dura con uno y sumirse en el desaliento[1]. Esta actitud transforma una dificultad natural en un problema insoluble, ya que nada ni nadie puede otorgar lo que se desea: no tener que esforzarse.





Otra dificultad que generalmente se transforma en problema es la que presenta el paso del tiempo. Las dificultades propias del envejecimiento son naturales y evidentes para cualquiera que esté dispuesto a verlas. Pero cuando alguien no quiere enfrentarlas, la solución que pretende es no envejecer, o envejecer sin sufrir los inconvenientes inherentes a la edad. Como no se puede lograr, cuando el envejecimiento trae dificultades se las transforma en fuente de miedo y resentimiento y, al buscar maneras para no enfrentar la situación, se crean problemas serios.



Es obvio que estos problemas no tienen solución, que la manera de superar las dificultades es enfrentarlas y trabajar sobre ellas. No aceptar las asperezas del camino es no aceptar el camino; no aceptar las dificultades es lo mismo que no aceptar la vida. La relación con los problemas ha de ser decidida y enérgica.



El único camino transitable que la mente tiene delante es comprender la naturaleza de sus problemas y el rol de su actitud en el origen de los mismos. No le ayuda saber si tiene razón al quejarse, si padece por culpa de algo o de alguien. Su problema no terminará castigando a un culpable ni esperando que cambie lo que no está en sus manos cambiar. Solamente trabajando sobre sí mismo el ser humano puede eliminar el problema, ya que en su interior tiene poder para cambiar, mejorar, comprender y realizar.



Cuando alguien descubre su fuerza interior y comprende que el origen de sus conflictos está en su actitud, sus problemas se simplifican hasta ser sólo las dificultades propias de la vida, que ella debe superar para desenvolverse. Cuando uno comprende su actitud, indefectiblemente encuentra el consejo oportuno, la ayuda necesaria, la fuerza interior que lo lleva a superar las dificultades. La relación con las dificultades ha de ser humilde, simple y valiente.



La relación con las dificultades es humilde cuando comprendemos y aceptamos nuestros límites; cuando sabemos reconocer el pequeño porcentaje de acontecimientos que podemos controlar y aceptar el resto como desafío para extraer la enseñanza que ellos encierran. Quien es humilde sabe que la ley de la vida no se puede cambiar a su antojo, que la única vida que puede vivir es la suya y que las dificultades que encuentra también le sirven como puntos de apoyo para su labor interior. El hombre y la mujer humildes pueden prever las dificultades pues al mirar la vida sin arrogancia ven con claridad el camino que tienen adelante.



La relación con las dificultades es simple cuando uno ama la verdad más que a la imagen que se hace de sí mismo. Quien anhela conocerse no interpreta las dificultades con razones rebuscadas. Sabe que las dificultades significan trabajo y esfuerzo y no las usa para tenerse lástima a sí mismo ni para justificar una actitud de derrota. Se ve a sí mismo tal como es, con virtudes y defectos, con limitaciones y posibilidades, y mira con ecuanimidad el camino que tiene por delante.



La relación con las dificultades es valiente cuando mueve a no retacear esfuerzos para superarlas. La mente sabe que tiene en sí misma la fuerza para realizar su vida en toda su plenitud y se pone a trabajar con toda su energía para su propio bien y el de todos los demás.



Cuando uno sabe que su fortaleza depende de su actitud frente a las dificultades, deja de soñar con una vida fácil y concentra su energía en trabajar para recorrer firmemente su camino de desenvolvimiento hasta el final.



Ejercicio número 3



Refuerzo de la Voluntad





Escribir, en la mayor cantidad de pequeños papeles que podamos disponer en todo lugar visible del hogar (los "post it" autoadhesivos son muy útiles, y más si son de colores variados), dos frases de manera tal que no podamos evitar verlos todos los días muchas veces al día, aunque no queramos reparar en ellos: la puerta de la heladera, la mesa de luz junto a la cama, detrás de la puerta de entrada a la casa, sobre la alacena, en el espejo del baño, tras la tapa del inodoro. Estas frases serán:





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Una máxima de Nietzche:



"Lo que no te mata, te fortalece"



Y otra de un servidor:



"Lo que no duele, no sirve" Ejercicio número 4



Lecturas de Formación





Experimentando con mis primeros alumnos -aquellos que han servido voluntariamente para imbricar este sistema- descubrí que ciertas lecturas, repetidas cíclicamente -una por día, durante una semana, una semana del mes, siempre la misma lectura y los mismos días del mes- cultiva armónicamente un equilibrio mente - alma en pos de fortalecer la Voluntad. Facilito entonces aquí el texto que yo mismo empleo. Siete días seguidos, apenas desayuno, dedico unos minutos a su lectura -aunque a estas alturas las recuerdo casi de memoria sigo leyéndolas con fruición y respeto, como un principiante; entiendo que ello cultiva mi humildad, lo que nunca está de más- y reflexiono sobre lo leído, tratando de proyectarlo a mi vida cotidiana y encontrar sentidos ocultos entre las líneas del día. El texto es el "Kagakure", que en japonés significa "oculto entre las hojas" y se entiende como un manual secreto medieval para los Samuráis.





Primer día:



CONCENTRACIÓN



En cierta ocasión vivía un maestro del arte de la lanza. En el momento de su muerte llamó a su mejor discípulo y le declaró: "Te he transmitido todas las técnicas secretas de nuestra escuela. Si piensas aceptar ahora a un discípulo, debes practicar enseguida con diligencia, y cada día, con el sable de madera. La superioridad no es una cuestión de técnicas secretas". Del mismo modo, en la enseñanza de un maestro de Renga, se dice que la víspera del concurso de poesía debe calmar su espíritu y consultar una antología de poesías. Es necesario saberse concentrar sobre una sola cosa. Todos los oficios deben ser ejercidos con concentración.





Segundo día:



LA ACTITUD DURANTE LA TORMENTA



Existe lo que se llama la actitud durante la tormenta. Cuando uno es sorprendido por una repentina tormenta, se puede o bien correr lo más aprisa posible o bien colocarse rápidamente bajo los aleros de las casas que bordean el camino. De todos modos nos mojaremos. Si uno ya estuviera preparado mentalmente a la idea de estar mojado, se estaría a fin de cuentas muy poco contrariado con la llegada de la lluvia. Se puede aplicar este principio con provecho en todas las situaciones.





Tercer día:



GANAR DESDE EL PRINCIPIO



Cuando ya era anciano, Tetsuzan hizo un día la reflexión siguiente: "Tenía tendencia a pensar que el combate a manos desnudas difería del Sumo, debido a que no tenía importancia ser tirado al suelo al principio, ya que lo esencial era ganar al final del combate. Recientemente he cambiado de punto de vista. Se me ha ocurrido que si un juez tomaba la decisión de parar el combate en el momento en que uno se encuentra en el suelo, os declararía vencido. Hay que ganar desde el principio para salir victorioso siempre."



Cuarto día: QUIEN CALCULA ES UN COBARDE



Un hombre que no para de calcular es un cobarde. Digo esto porque las suposiciones siempre tienen una relación con las ideas de provecho y de pérdida; el individuo que las hace está siempre preocupado por las nociones de ganancia o pérdida.



Morir es una pérdida, vivir una ganancia y es así que se decide a menudo no morir. Esto es cobardía. Del mismo modo, un hombre que ha recibido una buena educación puede camuflar, con su inteligencia y su elocuencia, su pusilanimidad o su estupidez, que son su verdadera naturaleza. Mucha gente no se da cuenta.



Quinto día: LAS DECISIONES



Un viejo proverbio dice: "Decidios en el espacio de siete soplos." El Señor Takanobu Ryuzoti hizo un día este comentario: "Si un hombre tarde demasiado en tomar una decisión, se duerme." El Señor Naoshige dice también: "Si uno se lanza sin vigor, siete de cada diez acciones no llegan a término. Es verdaderamente difícil tomar decisiones en estado de agitación. Por consiguiente, si sin ocuparse de las consecuencias menores, uno se enfrenta a los problemas con la mente afilada como una navaja, siempre se encuentra la solución en menos tiempo del preciso para hacer siete soplos."Hay que considerar los problemas con calma y determinación.



Sexto día: LEVANTAOS A LA OCTAVA



Es el colmo de la locura para un Samurai perder el control de sí mismo si por desgracia queda reducido al estado de ronin o se encuentra enfrentado a algún revés de fortuna del mismo tipo. En el tiempo del Señor Katsushige, los Samurais tenían una divisa favorita: "Si no habéis sido ronin siete veces, no podréis reivindicar



efectivamente el título verdadero de Samurai. Tropezad y caed siete veces, pero levantaos a la octava." Manifiestamente, Hyogo Naritomi había sido, según se dice, siete veces ronin. Un Samurai al servicio de un daimio debe ser como un tentetieso que se levanta cada vez que uno lo inclina. En verdad, sería una excelente idea para el Daimyo devolver a sus discípulos la libertad para someter a prueba su fuerza espiritual.



Séptimo día: DETERMINACIÓN



Cualquiera que sea la meta, nada es imposible de hacer cuando uno está determinado. Se puede entonces remover cielo y tierra según convenga. Pero cuando el hombre no tenga "el corazón en el vientre", no se puede persuadir de ello. Remover cielo y tierra sin esfuerzos es una simple cuestión de concentración.



Es bueno desarrollar su potencia hasta la edad de cuarenta años. En cambio es aconsejable "calmarse" a partir de los cincuenta. Cuando alguien os da su opinión, hay que saber aceptar con gratitud incluso si no es de ningún interés. Solo con esta condición os comunicará lo que ha oído decir de vosotros. Es bueno dar y recibir avisos de una manera amistosa.



Si en el campo de batalla no dejáis a nadie al cuidado de conducir el asalto y sois vosotros quienes tenéis la firme intención de penetrar en las filas enemigas, no caeréis, vuestro espíritu será bravo y manifestaréis vuestro valor marcial. Este consejo es una herencia de los antiguos. Por otro lado, si debéis ser derribado en el curso de un combate, estad decidido a serlo frente al enemigo.

Estimulación de la inteligencia intuitiva mediante la autohipnosis

Autor: Gustavo Fernández
Fuente: http://www.mailxmail.com/curso-dinero-control-mental-energotonia/estimulacion-inteligencia-intuitiva-autohipnosis


Es obvio el beneficio que obtendremos en el mundo material si desarrollamos la capacidad de una buena sugestión sobre terceros, sugestión que sólo será realmente efectiva si a las herramientas perceptibles -timbre de voz, mirada, etc.) le sumamos el vector telepático, esto es, la capacidad psíquica de influir sobre el otro. Para quien pueda cuestionarse si esto no es violar la libertad de albedrío del tercero, permítasenos señalar que, de hecho, vivimos seduciendo y sugestionando. Nuestros argumentos intelectuales, nuestra vestimenta, nuestro arreglo personal, en fin, el matiz personal que le damos a cada instante de la vida cotidiana cuando interrelacionamos con los demás conlleva la búsqueda de influir en esos otros, y la forma telepática, en tanto y en cuanto no es una imposición autoritaria sino simplemente una "matiz" subliminal que le damos a la relación, casa completamente con esa realidad cotidiana sonde la seducción del otro -entendiendo "seducción" no en sus sentido sexual o, más bien, deberíamos decir que el sentido sexual es sólo una de las formas de la seducción, siendo ésta apenas una arista de la sugestión).




Las 15 reglas de sugestión:



1. Corta. Nuestro cerebro puede procesar cinco datos simultáneos, e incluso siete, pero no veinte. Se deben evitar construcciones como: "El curso que deben tomar sus pensamientos debe incluir la posibilidad de cerrar trato conmigo". Es preferible decir: "Piense en mi propuesta que incluye etc."



2. Concreta. Se dirá: "Trabajaremos juntos".



3. Afirmativa. Como si lo que dijéramos estuviera pasando en este momento: "Es provechoso para ambos aceptar mis condiciones". No vale decir: "Me gustaría que aceptara mis..."



4. Positiva. La sugestión se aceptará mejor cuanto mayor sea la mejoría que proporcione al individuo: "Evitará penurias económicas si acepta mi propuesta" En cambio: "Sus ingresos mejorarán, sus clientes expresarán su satisfacción" Vemos como podemos decirlo de otra manera sin producir rechazo. Lea las dos frases anteriores y piense cual se aceptaría mejor. Seguramente suena mejor la última.



5. Repetitiva. Si a un sujeto se le dice que tendrá problemas "si no..." acabaremos por provocarle angustia. Deberíamos decir: "Cada una de mis palabras es una solución, es una puerta abierta, es dinero contante en su bolsillo hoy y mañana" (Como ves estamos diciendo lo mismo, pero de diferente forma)



6. Simple o superpuesta. Consiste en relacionar un hecho con otro (Aún cuando no tengan relación)



Simple: "Acepte mi propuesta".



Superpuesta: "Cuanto más acepte mi propuesta, mejor se vislumbra su futuro".



Esta sugestión superpuesta subordina la relación de una sugestión a la de otra. No existe en realidad una verdadera relación; es la capacidad de convicción del sugestionador la que la crea.



7. Inmediata o diferida:



Diferida: "Después de aceptar mi propuesta los resultados serán inmediatos".



Inmediata: "Ya tienes lo resultados con mi propuesta".



La diferida tiene dos ventajas: permite prevenir al sujeto, y evitar así toda emoción. Pero en sí misma es otra acción hipnótica que impulsa al individuo a prever otra realidad... a través del simple poder de su imaginación, que aún siendo el proceso inconsciente continúa actuando.



8. Intrahipnótica o posthipnótica:



Intrahipnótica se produce durante la sugestión. Posthipnótica: se refiere al momento posterior a la sugestión.



9. Progresiva. Si le dice a alguien: "Su proyecto será un fracaso", quizá necesite repetirlo durante quince minutos para que esa sensación se cree realmente. Pero si comienza diciendo: "Sus clientes se alejarán, su cuenta bancaria disminuirá, etc." puede que para obtener el mismo resultado sólo tenga que emplear cinco minutos.




10. Ponderada. Hay que anticiparse y evitar situaciones de estrés. No deberá decir: "Usted se ahoga en un vaso de agua" a un sujeto que se ha salvado de ahogarse unos años antes.



11. Cualificada. Adaptarse al vocabulario del sujeto a hipnotizar.



12. Convergente. "Su mente se aquieta y está tranquila, mi oferta le trae alegría, ambos seremos buenos socios", todo converge hacia una imagen clara de futuro estable y equilibrado en el destinatario.



13. Realizable. Si damos una sugestión que no pueda ser realizable por el sujeto. (No quiera, vaya en contra de sus principios, moral, ética, religión...) Puede suceder:



-Nada; -El sujeto genera la reacción opuesta



14. Sopesada. Hay que anticiparse a las reacciones psicológicas. No podemos decirle mentalmente que "lo queremos" si tiene prejuicios de tipo homosexual.



15. Normal o Subliminal. Una sugestión normal está destinada a ser escuchada. Una sugestión subliminal no debe serlo. Las voces subliminales son, por ejemplo, imágenes invisibles intercaladas en una película, frases pronunciadas a gran velocidad o en un tono tan bajo que no se puedan oír.



Autohipnosis:



En esta lección vamos a ver una técnica de autohipnosis que cualquiera puede hacerla sin ayuda de hipnotizador. Debido a que la mayoría de nosotros nos interesa la autohipnosis aplicada a los estudios y los negocios, mostramos la siguiente técnica:





Basa su eficacia en un ejercicio respiratorio determinado, y en la relajación que procura su ejecución. Se practica generalmente de pie o sentado.



Desarrollo: Con los dedos ligeramente separados, apoye la mano derecha sobre el ombligo y manténgala así durante todo el ejercicio. Apoye el dedo índice izquierdo en la zona central de la frente, mientras presiona con el pulgar izquierdo la aleta nasal izquierda y respira por la fosa nasal derecha, metiendo el vientre al inspirar y sacándolo al espirar. Inspire lenta y profundamente y concéntrese en el aire que penetra en su cuerpo a través de su fosa nasal derecha (la izquierda permanece apretada por su pulgar izquierdo). Cuando termine de inspirar, presione también la aleta nasal derecha con su dedo medio izquierdo. Permanezca así un momento, con los pulmones llenos. Levante el dedo pulgar y espire lentamente por la fosa nasal izquierda. La otra fosa nasal permanece cerrada. Permanezca unos instantes con los pulmones vacíos. Inspire por la fosa nasal izquierda. Terminada la inspiración, presione tu fosa nasal izquierda; repita las fases 2 a 8 unas diez veces.



Ya se trate de la fosa nasal izquierda o de la fosa nasal derecha, el esquema respiratorio es el mismo: espirar y después inspirar.





Nota: A pesar de que parece un poco complejo, este ejercicio se lleva a cabo en menos de un minuto, y acaba asimilándose perfectamente en muy poco tiempo. Pero, al principio es necesario repetirlo dos o tres veces al día; al cabo de una semana conviene practicarlo a diario por lo menos una vez, al mismo tiempo que se repite: "Me relajo... Me siento cada vez más relajado... Estoy completamente relajado". Posteriormente, cuando la práctica permita una ejecución automática, basta con emplear la palabra "relajado", mentalmente o en voz alta, y entonces y en ese momento, "carga"2 la consigna: "Voy a efectuar esa venta a Fulano de Tal". "Voy a aprobar ese examen con excelentes notas", etc.

jueves, 10 de junio de 2010

Los recuerdos viajan de un lado a otro de tu cerebro

Fuente http://lacomunidad.elpais.com/apuntes-cientificos-desde-el-mit/category/cerebro-y-comportamiento


Nuestro neurocientífico del MIT Miquel Bosch nos brinda un excelentísimo repaso de las investigaciones realizadas con el inolvidable amnésico H.M, y explica dónde vuestro cerebro está grabando esta lectura, a qué región la trasladará dentro de unas horas, y en qué otras neuronas terminará alojada sólo en el caso de haberos gustado.








La ruta de la memoria, por Miquel Bosch



Henry G. Molaison murió el pasado 2 de diciembre de 2008 a la edad de 82 años. No exagero en absoluto si digo que ha sido el paciente más famoso de la historia de la neurología. Era mundialmente conocido por todos los investigadores, médicos y estudiantes de neurociencias, no por su nombre real, que permanecía en secreto, sino por las iniciales H.M. El “accidentado” intento de curarle su epilepsia lo convirtió sin querer en el protagonista de uno de los descubrimientos más revolucionarios de la neurociencia.





Un amnésico inolvidable





La historia de H.M. comienza en Hartford, Connecticut, cuando fue arrollado por una bicicleta a la edad de 9 años. Empezaron entonces sus primeros ataques epilépticos, que empeoraron durante los siguientes 20 años hasta el punto de impedirle trabajar y llevar una vida normal. Un neurocirujano decidió probar un tratamiento experimental un tanto drástico: extirpar por completo el foco de la epilepsia. De esta forma, en 1953, H.M. despertó de la operación sin una parte de sus lóbulos temporales mediales, que albergaba una pequeña región llamada hipocampo. Los ataques epilépticos desaparecieron casi por completo, pero a un precio altísimo. A partir de ese momento no podía formar nuevos recuerdos. Lo olvidaba todo en pocos segundos. Se acordaba perfectamente de todo lo ocurrido antes de la operación: su infancia durante los difíciles años que siguieron al crack de 1929, la segunda guerra mundial, su trabajo reparando motores... Sin embargo, no era capaz de recordar nada de lo ocurrido después. Conservaba unas excelentes capacidades intelectuales (con un cociente de inteligencia superior a la media) y un gran sentido del humor. Podía mantener una conversación y recordar un número de 8 dígitos durante unos 30 segundos. Pero si algo le distraía su atención, no sólo no recordaba el número, sino que no conocía a la persona que tenía delante ni entendía porqué le estaba pidiendo que recitara 8 dígitos. Es decir, tenía una excelente memoria a corto plazo y una buena memoria a largo plazo. Lo que no podía hacer es convertir la una en la otra. Una perfecta representación de su caso es el protagonista de la película “Memento”.

Suzanne Corkin, profesora del MIT, es una de las personas que mejor conocía a H.M. Fue el objeto de su tesis doctoral y estuvo 46 años entrevistándolo continuamente. No obstante, tenía que presentarse a H.M. cada vez que lo visitaba. Para H.M. el mundo paró de girar en 1953. Su tiempo se congeló el día de su operación. Aunque leía cada día los periódicos y veía la televisión, no sabía quienes eran los Bush, ni los Clinton. Su presidente seguía siendo Eisenhower.



La recuerdos viajan por tu cerebro





H.M. nos enseñó, muy a su pesar, que el hipocampo es esencial para consolidar los recuerdos a largo plazo. La memoria sigue siendo, a día de hoy, un misterio con innumerables cabos sueltos, pero desde H.M. sabemos varias cosas con certeza: 1) La memoria es un fenómeno independiente de otras capacidades mentales, como la consciencia o la percepción sensorial. 2) Hay muchas clases de memoria, por ejemplo, la de corto y la de largo plazo (hay más). 3) Cada una se almacena en lugares diferentes del cerebro.





Hoy sabemos que los recuerdos viajan constantemente por el cerebro. Fluyen de una región a otra, pero siempre en la misma dirección. Todos reconoceréis este famoso cuadro de Dalí (¿Cuál es su título?). La primera vez que lo visteis, sus colores, sus formas y texturas, saltaron de vuestra retina a la corteza visual (en la nuca), y de allí se extendieron al resto de vuestra corteza donde se mantuvieron unos segundos flotando codificadas en forma de una nube de fogonazos eléctricos.





En los siguientes minutos toda esa información, aún frágil y volátil, inundó el hipocampo, donde empezó el proceso de “grabación en soporte físico”, es decir, la modificación de las conexiones neuronales. Sin hipocampo, la nube eléctrica no tiene lugar donde reposar y se disipa como el humo de un cigarrillo a la menor distracción. Pero ahí no acaba la travesía de la memoria. En los siguientes días, y sin que os dierais cuenta, el cuadro de Dalí fue poco a poco viajando de vuelta a la corteza cerebral, pero esta vez alterando los circuitos neuronales para almacenarse de forma indefinida. Se sospecha que esta transferencia final del hipocampo a la corteza tiene lugar mientras dormimos (esto dará para otro post).

Aprendizaje inconsciente





Durante años se pensó que H.M. era incapaz de consolidar nuevos recuerdos, pero en 1962 un nuevo experimento volvió a sacudir a la comunidad neurocientífica.





Le pidieron que trazara los contornos de una estrella viendo su mano reflejada en un espejo. Si lo probáis (aquí) veréis que al principio no es nada fácil. Sorprendentemente H.M. aprendió a hacerlo con soltura a fuerza de repetirlo muchas veces, como le sucede a todo el mundo. Pero para él, cada vez que lo probaba era como si fuera la primera vez. “Anda, pero si es más fácil de lo que me esperaba”, exclamó al cabo de unos días.





Así es como se descubrieron los dos tipos básicos de memoria: 1) la explícita, que nos permite recordar datos, imágenes, números de teléfono, cuál es la capital de Japón, etc. y 2) la implícita, que nos permite ir en bici o tocar el piano, y que adquirimos de forma repetitiva e inconsciente. La primera está controlada por el hipocampo y es la que H.M. había perdido. La segunda reside en otras zonas, como el cerebelo o los ganglios basales, y por eso H.M. la mantenía intacta.

El último viaje de H.M: de Boston a la inmortalidad





H.M. murió a las a las 5:05 de la tarde. En ese mismo instante un comité creado especialmente para ese día se puso a trabajar sin perder un segundo. La Dra. Corkin no tuvo tiempo de entristecerse por la muerte de su viejo amigo hasta la mañana siguiente: se pasaron toda la noche en el Hospital General de Massachussets, en Boston, escaneando la cabeza de H.M. por resonancia magnética.





Jacopo Annese, que llegó de madrugada desde San Diego, era el elegido para llevar a cabo el proceso de conservación del cerebro. Aunque es uno de los mayores expertos del mundo, admitió estar sudando a borbotones mientras le extraía el cerebro. Después de todo, era el cerebro más famoso de la historia de la neurociencia (más que el de Einstein, del que ya hablaremos otro día). Annese voló de vuelta a San Diego con el cerebro crioprotegido de H.M a su lado, en asiento de “ventanilla”. Ahora su misión es crear un atlas digital de alta resolución, que será de acceso público para que todo aquel que quiera pasearse por los núcleos cerebrales del famoso amnésico, con la misma tecnología desarrollada para Google Maps (próximamente en thebrainobservatory.ecsd.edu).





En estos momentos el cerebro de H.M. se encuentra cortado en unas 2600 finas lonchas, y está siendo fotografiado en detalle (a 40000 imágenes por loncha). La cadena de TV americana PBS ha realizado un documental (en el que tuve la suerte de colaborar) sobre H.M. y el procesamiento de su cerebro. Annese tiene la intención de crear otros atlas de cerebros afectados por diferentes enfermedades (Alzheimer, Parkinson…), así como de cerebros sanos (que son los más difíciles de obtener). El que quiera donar su cerebro para la posteridad aún está a tiempo de salir en la foto.

Los que más se afanan por buscar pareja son los de menos cerebro

Fuente http://blog.evolutionibus.info/?p=127

Ya se escribió aquí algo sobre el tamaño del cerebro en los primates y su relación con la inteligencia. Lo que ahora se publica en PLoS ONE tiene que ver con el asunto, aunque transversalmente. El increíble incremento de la masa cerebral en los primates se ha explicado de muchas maneras, como, por ejemplo, que es consecuencia de la complejidad social. Precisamente en el córtex prefrontal es donde residen las habilidades sociales y de orden superior, que serían seleccionadas a favor.




En el trabajo de Michael A. Schillaci se busca una relación entre el tamaño del cerebro y la selección sexual, vista esta como competencia entre el esperma (se mide el tamaño de los testículos) y la búsqueda de pareja por parte de los machos (estimada como variación en el dimorfismo sexual).



Los curiosos resultados parecen indicar que la relación es de tipo negativo, a saber: no existe una relación entre el tamaño de los testículos y el del cerebro y, lo que es más interesante, que la relación entre la talla encefálica y la búsqueda de pareja es negativa.





En el gráfico se muestra la regresión negativa del tamaño del cerebro respecto del dimorfismo sexual.

Dicho de otro modo, los que más se afanan por buscar pareja son los de menos cerebro, tal cual. O sea, que, finalmente, la monogamia es la que sí habría posibilitado o favorecido, de alguna manera, el incremento de la masa encefálica en primates.


Fuente http://www.plosone.org/article/fetchArticle.action?articleURI=info%3Adoi%2F10.1371%2Fjournal.pone.0000062

Abstract Top


Reproductive competition among males has long been considered a powerful force in the evolution of primates. The evolution of brain size and complexity in the Order Primates has been widely regarded as the hallmark of primate evolutionary history. Despite their importance to our understanding of primate evolution, the relationship between sexual selection and the evolutionary development of brain size is not well studied. The present research examines the evolutionary relationship between brain size and two components of primate sexual selection, sperm competition and male competition for mates. Results indicate that there is not a significant relationship between relative brain size and sperm competition as measured by relative testis size in primates, suggesting sperm competition has not played an important role in the evolution of brain size in the primate order. There is, however, a significant negative evolutionary relationship between relative brain size and the level of male competition for mates. The present study shows that the largest relative brain sizes among primate species are associated with monogamous mating systems, suggesting primate monogamy may require greater social acuity and abilities of deception.

miércoles, 2 de junio de 2010

La química del amor

Fuente http://centros5.pntic.mec.es/ies.victoria.kent/Rincon-C/Curiosid/Rc-51.htm

La química del amor

Francisco Muñoz de la Peña Castrillo, IES Carolina Coronado, Almendralejo






Con este artículo pretendo ofrecer en un tono divertido y ameno una visión fundamentalmente química de algo tan sencillo como maravilloso que nos ocurre a todos alguna vez en la vida: ¡Enamorarnos!.



Los poetas nos han deleitado cantando al más maravilloso de los sentimientos desde todos los ángulos y con infinitos matices, pero los químicos también tenemos cosas que decir al respecto, quizás menos seductoras pero no por ello menos importantes.



¿Por qué nos enamoramos de una determinada persona y no de otra? Innumerables investigaciones psicológicas demuestran lo decisivo de los recuerdos infantiles -conscientes e inconscientes-. La llamada teoría de la correspondencia puede resumirse en la frase: "cada cual busca la pareja que cree merecer".



Parece ser que antes de que una persona se fije en otra ya ha construido un mapa mental, un molde completo de circuitos cerebrales que determinan lo que le hará enamorarse de una persona y no de otra. El sexólogo John Money considera que los niños desarrollan esos mapas entre los 5 y 8 años de edad como resultado de asociaciones con miembros de su familia, con amigos, con experiencias y hechos fortuitos. Así pues antes de que el verdadero amor llame a nuestra puerta el sujeto ya ha elaborado los rasgos esenciales de la persona ideal a quien amar.



La química del amor es una expresión acertada. En la cascada de reacciones emocionales hay electricidad (descargas neuronales) y hay química (hormonas y otras sustancias que participan). Ellas son las que hacen que una pasión amorosa descontrole nuestra vida y ellas son las que explican buena parte de los signos del enamoramiento.



Cuando encontramos a la persona deseada se dispara la señal de alarma, nuestro organismo entra entonces en ebullición. A través del sistema nervioso el hipotálamo envía mensajes a las diferentes glándulas del cuerpo ordenando a las glándulas suprarrenales que aumenten inmediatamente la producción de adrenalina y noradrenalina (neurotransmisores que comunican entre sí a las células nerviosas).



Sus efectos se hacen notar al instante:



El corazón late más deprisa (130 pulsaciones por minuto).

La presión arterial sistólica (lo que conocemos como máxima) sube.

Se liberan grasas y azúcares para aumentar la capacidad muscular.

Se generan más glóbulos rojos a fin de mejorar el transporte de oxígeno por la corriente sanguínea.

Hay dos cosas que el hombre no puede ocultar: que está borracho y que está enamorado

Antífanes -388-311 a. C.-, comediógrafo griego



Los síntomas del enamoramiento que muchas personas hemos percibido alguna vez, si hemos sido afortunados, son el resultado de complejas reacciones químicas del organismo que nos hacen a todos sentir aproximadamente lo mismo, aunque a nuestro amor lo sintamos como único en el mundo.



Ese estado de "imbecilidad transitoria", en palabras de Ortega y Gasset, no se puede mantener bioquímicamente por mucho tiempo.



No hay duda: el amor es una enfermedad. Tiene su propio rosario de pensamientos obsesivos y su propio ámbito de acción. Si en la cirrosis es el hígado, los padecimientos y goces del amor se esconden, irónicamente, en esa ingente telaraña de nudos y filamentos que llamamos sistema nervioso autónomo. En ese sistema, todo es impulso y oleaje químico. Aquí se asientan el miedo, el orgullo, los celos, el ardor y, por supuesto, el enamoramiento. A través de nervios microscópicos, los impulsos se transmiten a todos los capilares, folículos pilosos y glándulas sudoríparas del cuerpo. El suave músculo intestinal, las glándulas lacrimales, la vejiga y los genitales, el organismo entero está sometido al bombardeo que parte de este arco vibrante de nudos y cuerdas. Las órdenes se suceden a velocidades de vértigo: ¡constricción!, ¡dilatación!, ¡secreción!, ¡erección! Todo es urgente, efervescente, impelente... Aquí no manda el intelecto ni la fuerza de voluntad. Es el reino del siento-luego-existo, de la carne, las atracciones y repulsiones primarias..., el territorio donde la razón es una intrusa.



Hace apenas 13 años que se planteó el estudio del amor como un proceso bioquímico que se inicia en la corteza cerebral, pasa a las neuronas y de allí al sistema endocrino, dando lugar a respuestas fisiológicas intensas.



El verdadero enamoramiento parece ser que sobreviene cuando se produce en el cerebro la FENILETILAMINA, compuesto orgánico de la familia de las anfetaminas.



Al inundarse el cerebro de esta sustancia, éste responde mediante la secreción de dopamina (neurotransmisor responsable de los mecanismos de refuerzo del cerebro, es decir, de la capacidad de desear algo y de repetir un comportamiento que proporciona placer), norepinefrina y oxiticina (además de estimular las contracciones uterinas para el parto y hacer brotar la leche, parece ser además un mensajero químico del deseo sexual), y comienza el trabajo de los neurotransmisores que dan lugar a los arrebatos sentimentales, en síntesis: se está enamorado. Estos compuestos combinados hacen que los enamorados puedan permanecer horas haciendo el amor y noches enteras conversando, sin sensación alguna de cansancio o sueño.



El affair de la feniletilamina con el amor se inició con la teoría propuesta por los médicos Donald F. Klein y Michael Lebowitz del Instituto Psiquiátrico de Nueva York, que sugirieron que el cerebro de una persona enamorada contenía grandes cantidades de feniletilamina y que sería la responsable de las sensaciones y modificaciones fisiológicas que experimentamos cuando estamos enamorados.



Sospecharon de su existencia mientras realizaban un estudio con pacientes aquejados "de mal de amor", una depresión psíquica causada por una desilusión amorosa. Les llamó la atención la compulsiva tendencia de estas personas a devorar grandes cantidades de chocolate, un alimento especialmente rico en feniletilamina por lo que dedujeron que su adicción debía ser una especie de automedicación para combatir el síndrome de abstinencia causado por la falta de esa sustancia. Según su hipótesis el, por ellos llamado, centro de placer del cerebro comienza a producir feniletilamina a gran escala y así es como perdemos la cabeza, vemos el mundo de color de rosa y nos sentimos flotando.



Es decir LAS ANFETAMINAS NATURALES TE PONEN A CIEN.



El 50% de las mujeres entrevistadas para el libro Por qué necesitan las mujeres del chocolate confesó que elegiría el chocolate antes que el sexo. Hay quienes al chocolate lo llaman EL PROZAC VEGETAL.



En una de las aventuras de Charlie Brown se puede leer "una buena manera de olvidar una historia de amor es comerse un buen pudin de chocolate".



Su actividad perdura de 2 a 3 años, incluso a veces más, pero al final la atracción bioquímica decae. La fase de atracción no dura para siempre. La pareja, entonces, se encuentra ante una dicotomía: separarse o habituarse a manifestaciones más tibias de amor -compañerismo, afecto y tolerancia-. Dos citas muy interesantes son:



El amor es como la salsa mayonesa: cuando se corta, hay que tirarlo y

empezar otro nuevo.

Enrique Jardiel Poncela.



El amor es como Don Quijote: cuando recobra el juicio es para morir.

Jacinto Benavente



Con el tiempo el organismo se va haciendo resistente a los efectos de estas sustancias y toda la locura de la pasión se desvanece gradualmente, la fase de atracción no dura para siempre y comienza entonces una segunda fase que podemos denominar de pertenencia dando paso a un amor más sosegado. Se trata de un sentimiento de seguridad, comodidad y paz. Dicho estado está asociado a otra DUCHA QUÍMICA. En este caso son las endorfinas -compuestos químicos naturales de estructura similar a la de la morfina y otros opiáceos- los que confieren la sensación común de seguridad comenzando una nueva etapa, la del apego. Por ello se sufre tanto al perder al ser querido, dejamos de recibir la dosis diaria de narcóticos.



Para conservar la pareja es necesario buscar mecanismos socioculturales (grata convivencia, costumbre, intereses mutuos, etc.), hemos de luchar por que el proceso deje de ser solo químico. Si no se han establecido ligazones de intereses comunes y empatía, la pareja, tras la bajada de FEA, se sentirá cada vez menos enamorada y por ahí llegará la insatisfacción, la frustración, separación e incluso el odio.



Parece que tienen mayor poder estimulante los sentimientos y las emociones que las simples substancias por sí mismas, aquellos sí que pueden activar la alquimia y no al sentido contrario.



Un estudio alemán ha analizado las consecuencias del beso matutino, ése que se dan los cónyuges al despedirse cuando se van a trabajar. Los hombres que besan a sus esposas por la mañana pierden menos días de trabajo por enfermedad, tienen menos accidentes de tráfico, ganan de un 20% a un 30% más y viven unos ¡cinco años más! Para Arthur Sazbo, uno de los científicos autores del estudio, la explicación es sencilla: "Los que salen de casa dando un beso empiezan el día con una actitud más positiva".



Es cierto, no podemos negarlo, es un hecho científico que existe una química interna que se relaciona con nuestras emociones y sentimientos, con nuestro comportamiento, ya que hasta el más sublime está conectado a la producción de alguna hormona.



No hay una causa y un efecto en la conducta sexual, sino eventos físicos, químicos, psíquicos, afectivos y comunicacionales que se conectan de algún modo, que interactúan y se afectan unos a otros.



Existe, sí, una alquimia sexual, pero se relaciona íntimamente con los significados que le damos a los estímulos, y éstos con el poder que les ha concedido una cultura que, a su vez, serán interpretados por cada uno que los vive de acuerdo con sus recursos personales y su historia. Esperemos que estos estudios en un futuro nos conduzcan a descubrir aplicaciones farmacológicas para aliviar las penas de amor.



Espero que una vez leído este artículo no le digáis a vuestra pareja después de hacer el amor: "he tenido una sensación sumamente agradable producto del aumento de testosterona y la disminución consiguiente de serotonina", entre otras cosas porque os estrangularía.



Para terminar otras interesantes citas:



Dicen que el hombre no es hombre mientras no oye su nombre

de labios de una mujer.

Antonio Machado



El amor es ciego, el matrimonio le devuelve la vista.